El uso de las grúas torre en las obras de construcción es bastante común, debido a sus grandes capacidades de carga y los diferentes tipos de apoyo de base que puede utilizarse según las necesidades del proyecto. Este tipo de grúas puede quedar fija al suelo o a alguna estructura anexa que le sirve como base. Además, debido al alcance y a la altura a la que pueden llegar son muy usadas en construcción de edificios altos.
Según el gerente general de ETAC Perú, Carlos Villacorta, las grúas torre antes no eran tan utilizadas debido a dos razones: primero, porque que existía un desconocimiento muy grande al respecto de estos equipos y, segundo, porque la mano de obra resultaba mucho más barata que el alquiler de estos equipos. No obstante, esto ha cambiado. No solo porque la mano de obra ha incrementado su precio sino porque, además, existen muchas maniobras que son imposibles de realizarlas sin la utilización de equipos auxiliares como las grúas torre.
Por ejemplo, descargar un camión con ladrillos, con paquetes de acero, con elementos prefabricados, con encofrados, entre otros, toma mucho más tiempo realizarlo de manera manual que mediante la utilización de una grúa torre y, en algunos casos, como en la descarga de prefabricados o de encofrados metálicos, sería simplemente imposible descargarlos solo utilizando la fuerza humana.
Asimismo, indica que estos equipos suelen contar con 3 motores que permiten manejar el sistema de elevación, el sistema de giro y el sistema del carrito. “Por ejemplo, las grúas abatibles no cuentan con carrito, simplemente se abaten hasta llegar a la posición deseada”, comenta la empresa.
Por su parte, el gerente general de ETAC Perú, manifiesta que, además, estas grúas pueden tener tirantes o no, dependiendo el modelo que sean. Cuando tienen tirantes se llaman “topkit” (porque tienen cabeza de torre girante) y cuando no lo tienen, se denominan “topless”, porque no tiene cabeza de torre.
A parte de ello, Villacorta señala que las versiones de los tipos de colocación de grúas torre pueden ser empotrada, cuando se utiliza una zapata de cimentación; o puede estar sin zapata y apoyada en un chasis, sobre el cual, incluso, se puede colocar un sistema de traslación, lo que permitirá que la grúa pueda moverse completamente. También puede utilizarse de manera autotrepante, mediante los ductos de los ascensores, de tal manera que la grúa se eleva conforme va creciendo la edificación.
Asimismo, una vez que el operador de la grúa acciona cualquiera de las 3 maniobras disponibles en la cabina o en el mando inalámbrico, ya sea de elevación, traslación o giro, el cuadro eléctrico de la grúa da paso a la alimentación del motor seleccionado y, de esa manera, se da inicio a la maniobra del equipo. “Si acciona el giro, la grúa se moverá circularmente hasta los 360°; si acciona la traslación, el carrito se moverá hacia delante o hacia atrás; y, si acciona la elevación, el gancho de la grúa subirá o bajará”, agrega.
Además, asegura que el tener una grúa torre obliga a que el programa de la obra se cumpla al pie de la letra, porque estos equipos se programan para distintos trabajos. “Por ejemplo, puedes programar para que todo lo que sea encofrado sea en la mañana, transporte de fierro a media mañana y en la tarde te dedicas básicamente a vaciar concreto, porque la grúa también con unos capachos puede vaciar concreto. Entonces, la grúa genera que se cumpla tu programa y con eso que tengas una eficiencia de producción óptima”, añade.
Por su parte, Agrumaq sostiene que la grúa torre es recomendada para cualquier tipo de obra, pues no solo se limita a distribuir los materiales, sino también puede cumplir la función de realizar los vaciados de concreto, con lo cual se ahorra en el costo de tener que alquilar y hacer uso de una bomba de concreto. De igual manera, “puede realizar la eliminación del material excedente de la obra en el proceso de excavación”, llegando a eliminar entre 600 y 800 metros cúbicos diarios, dependiendo la capacidad de la GT.
“Por ello la grúa torre no solo ayuda a reducir el tiempo de ejecución del proyecto, sino que además reduce los costos en el proceso de excavación y construcción del proyecto”, afirma.
Verbigracia, el caso de una minera, en la que la grúa se utiliza para la construcción, pero se queda en el lugar para el mantenimiento, porque va tener que cargar estructuras de extremado peso.
La empresa Agrumaq, que comercializa la grúa torre Liebherr 125 Litronic, señala que en el caso de este equipo la capacidad máxima de carga llega a las 125 toneladas. Asimismo, manifiesta que antes de montar una grúa torre se deben tener en cuenta tres factores que menciona a continuación:
Si es un proyecto de vivienda u oficinas debemos conocer los pesos a izar (materiales como prelosas, acero, encofrado, ladrillos, acabados, etcétera). En caso que sea un proyecto industrial o minero, debemos conocer las cargas máximas que vamos a izar.
Se debe estudiar los planos del proyecto para analizar cuál es la mejor posición para la ubicación de la GT.
Grúa torre empotrada: la grúa torre se monta con cimentación. Incluso se puede aprovechar las mismas zapatas de cimentación del proyecto para montar la grúa.
Grúa torre con chasis: la grúa torre se monta sobre un chasis con contrapesos.
Grúa torre con chasis y traslación: la grúa torre se monta sobre chasis y en la parte inferior cuenta con un sistema de traslación. Esta se mueve sobre rieles de manera similar a un tren.
Grúa automontante: es una grúa de pequeñas dimensiones remolque. La misma no necesita de otra grúa para su montaje ni de cimentación, ya que cuenta con un sistema hidráulico para ser autosuficiente para montarse por sus propios medios. En la parte inferior cuenta con 4 patas con las que se apoya en el terreno.
Grúa torre automontante sobre orugas: es una grúa similar a la anterior, pero en este caso se puede mover por sus propios medios al incorporarle un sistema de orugas en su parte inferior.
Grúa torre automontante sobre camión: también denominada grúa taxi, debido a que en la parte inferior cuenta con un camión para poder desplazarse por carreteras. La misma tarda 14 minutos en instalarse y otros 14 en desinstalarse.
Grúa de pluma abatible: este tipo de grúa puede montarse en la cimentación del proyecto o con chasis. La peculiaridad de este tipo de grúa es que no cuenta con carrito de traslación, por lo que simplemente se abate y llega al lugar deseado.
Grúa Derrick: está diseñada exclusivamente para el desmontaje de grúas torre de gran tonelaje en edificios de mucha altura. La misma se monta en la última planta del edificio, y conforme se va desmontando la otra GT va bajando los elementos al primer piso del edificio. Una vez que se ha terminado el desmontaje de la GT la grúa Derrick se va desmontando en partes y se baja al primer piso. Por su parte, el gerente general de ETAC Perú sostiene que hay diversas formas de clasificarlas.
Según el apoyo de base que tengan, pueden ser empotrada, rodante, apoyada y trepadora. Por el giro de tornamesa, están las grúas torre y las automontables. Estas últimas giran en la parte inferior, como una excavadora. En cambio, las grúas torre giran en la parte superior, ya que la tornamesa de estas está en esta parte.
Entre las normas de seguridad más importantes que se tienen en cuanto a la utilización de este tipo de grúas, tenemos: no ejecutar maniobras con carga sino se tiene una visión completa del panorama; no se debe intentar cargas pesos que a simple vista sobrepasan la capacidad de la grúa torre; se debe asegurar que nada de lo que se carga se vaya a desprender; es aconsejable utilizar amortiguadores o protectores, como madera blanda o goma, para proteger a los estrobos de bordes afilados de alguna carga; evitar los desplazamientos bruscos; entre otros.
El representante de ETAC Perú señala que las grúas se fabrican en base a normas, ya sean del lugar del fabricante o cualquier otra normativa internacional que le brinde garantía. Asimismo, tienen una serie de elementos de seguridad que evitan que, si algo fallara, la grúa se caiga. “Es muy difícil que una grúa se caiga. Cuando esto ha pasado es básicamente por responsabilidad del ser humano, independientemente de la marca”, asegura.
“El estándar es que las grúas cuenten con limitadores, con cabinas, con pantallas LCD que te permitan identificar ciertos parámetros indispensables para poder tener una operación segura, que cuenten con anemómetros, por ejemplo, puesto que es esencial medir la velocidad del viento”, añade.
Finalmente, Villacorta comenta que hay grúas que trabajan en plantas nucleares que tienen más de 40 sensores para validar si es que la temperatura del motor está incrementándose o para validar si la estructura de la grúa está teniendo una posible fisura y así, una serie de cosas que permiten tener la seguridad extrema en la utilización de estas maquinarias.
Por su lado, Agrumaq indica que varias de las grúas torre que oferta al mercado cuentan con los sistema FR.tronic y Litronic, “mediante el cual las grúas son manejadas con un PLC y variadores de frecuencia en todas las maniobras, por lo que hasta los limitadores son sensores electrónicos y ya no mecánicos. Esto se traduce en el rendimiento más alto del mercado, puesto que podemos llegar a cargar hasta 60 toneladas con el simple reenvío de cable, hasta 100 con el doble reenvío y hasta 125 toneladas con el triple reenvío”, puntualiza.