La idea de separar las edificaciones del suelo para impedir que las aceleraciones sísmicas dañen las edificaciones y sus contenidos es muy antigua. No es sino hasta el año 1975 que el Ingeniero Neozelandés William Robinson crea los aisladores elastoméricos con núcleo de plomo y junto con ellos, hace técnica y comercialmente factible la implementación de aislamiento sísmico a través de su empresa Robinson Seismic.
A pesar de la llegada tardía de esta tecnología, la ingeniería peruana logró actualizarse al punto de publicar la primera norma peruana de aislamiento sísmico en noviembre del 2019.
La elaboración de la norma peruana E.031 “Aislamiento sísmico” se basó en la última versión de la norma norteamericana “ASCE 7” publicada en el 2017 incorporando nuestras condiciones locales y mayores exigencias con la finalidad de que los edificios aislados puedan continuar operativos inmediatamente después de terremotos importantes.
En la actualidad, el Perú cuenta con más de 100 edificios con aislamiento sísmico en los rubros salud, educación, comercio, oficinas, y vivienda. Desde el 2014 el gobierno peruano exige que hospitales y clínicas de categoría II y III según MINSA en nuestras dos zonas de mayor sismicidad cuenten con aislamiento sísmico y sean diseñados para continuar operativos luego de terremotos severos.
Uno de los logros de Prisma Ingenieros es haber diseñado la mayor cantidad de edificios aislados en el Perú, logrando determinar que el costo adicional por implementación del sistema oscila entre 0% y 10% del costo de la estructura, dependiendo de las características propias de la edificación, ubicación y suelo. Incluso algunos edificios de vivienda económica han sido diseñados con este sistema.
Por estas razones, en Japón se han ejecutado más de 4700 edificios aislados principalmente para vivienda y oficinas.
Esta creciente demanda también requiere mayor especialización por parte de la comunidad de ingeniería nacional para poder aplicar correctamente la norma peruana en el diseño, evaluación de propuestas de provisión de los dispositivos y verificación de ensayos reglamentarios que deben realizarse a los aisladores.
El adecuado conocimiento del diseño, evaluación y ejecución del sistema es importantísimo. En el mundo se han presentado algunos casos de mal comportamiento de estos sistemas, principalmente asociados a malas ejecuciones en obra o malos diseños de ingeniería.
Por las razones anteriores, es necesario que la comunidad de ingeniería profundice en el conocimiento de estos sistemas y sus dispositivos, lo cual debería ser impulsado desde las universidades y otras entidades que puedan brindar una adecuada capacitación.